Gupo gallina alicantina
Gupo gallina alicantina

Historia

 
En 1999 dos miembros del Grupo Naturalista Heliaca de Monóvar (Alicante), interesados en la cría de gallinas autóctonas de la zona, iniciamos una búsqueda por las zonas más rurales de la comarca. Encontramos unos pocos ejemplares de unas gallinas de color muy uniforme, de tamaño grande y cresta caída hacia un lateral (sólo se encontraron hembras, pues los machos habían sido sacrificados por los propietarios para su consumo). Según la información que nos dio el propietario, se trataba de gallinas muy antiguas, pues las conservaba desde hacía más de 50 años.


Preguntamos a gente relacionada con el campo y aficionada a la cría de animales domésticos, algunas personas sí conocían este tipo de gallina e incluso habían tenido ejemplares. Desgraciadamente, debido a diversas circunstancias pero muy especialmente a la transformación de la avicultura tradicional por la invasión de híbridos extranjeros, inconscientemente optaron por eliminar a las autóctonas.


Seguimos investigando y nos hablaron de Julio Díez, persona que posee una dilatada experiencia, más de 50 años en la cría y conservación de gallinas autóctonas de la provincia de Alicante. Contactamos con él y se traslado al municipio de Monóvar, localidad donde encontramos los ejemplares y cuando las vio, no daba crédito a lo que tenía delante de sus ojos. Quedó atónito. Nos dijo que eran gallinas Alicantinas auténticas, idénticas a un núcleo de unos veinte ejemplares que él conserva desde hace más de 40 años. Julio nos comentó que pensaba que ya no quedaba nada de esto aparte de los ejemplares que él poseía, pues llevaba más de 30 años buscando gallinas antiguas en todos los rincones de la provincia sin encontrar nada interesante.


Según nos contó Julio Díez, este tipo de gallina era la que dominaba antiguamente los corrales de los caseríos en el ambiente rural de la provincia de Alicante. Siendo él un adolescente, recuerda esta variedad de gallina en la mayoría de los gallineros, donde se criaban unos gallos espectaculares y unas gallinas que parecían pavas. También se criaban otras variedades de gallinas autóctonas y que todavía Julio conserva alguna en su casa.


Mandamos al Dr. Fernando Orozco varias fotografías de gallos y gallinas. Meses más tarde, recibimos una llamada telefónica del Sr. Orozco, confirmando que se trataba de gallinas de características del tipo mediterráneo y que con toda seguridad eran gallinas denominadas alicantinas o blanqueñas, nombradas en ocasiones por el profesor Salvador Castelló. También nos comentó que su padre conocía este tipo de gallina e incluso había criado algunos ejemplares.


Orozco nos animó a empezar un proyecto de recuperación y de caracterización de la gallina alicantina, pero por motivos de salud y a su edad avanzada nos dijo que no nos podía ayudar en la labor de asesoramiento técnico. Por lo que nos remitió al Dr. Amadeu Francesch de la unidad de genética avícola de IRTA, gran amigo suyo, mucho más joven y entendido en la materia (esas fueron sus palabras).


Nos pusimos en contacto con Amadeu Francesch y le mandamos varias fotografías de gallina alicantina y de otras variedades autóctonas de la zona. Amadeu se interesó bastante por el tema y en Abril de 2004 visitamos el IRTA, lugar donde Amadeu trabaja, con la intención de hablar con él personalmente y conocer de primera mano qué posibilidades de futuro tenían nuestras gallinas.


Desde aquel día hasta el día de hoy, Amadeu nos ha estado prestando todo su apoyo profesional y moral en la caracterización de las gallinas, y desde aquí le expresamos nuestro agradecimiento.

 

Actualmente, contamos con 3 núcleos de gallinas en diferentes comarcas de la provincia donde fueron encontrados en origen los ejemplares, concretamente las comarcas de l’Alcoia, Vinalopó mitja y Baix Vinalopó. Estos núcleos, formados por un total de unos 15 gallos y unas 50 gallinas, pertenecen a gallinas alicantinas plateadas, conocidas por los lugareños como “afabades”, término valenciano que se utiliza para decir que las gallinas tienen el color de la flor de la planta del haba; relato que nos contó Pepe, un pastor de avanzada edad (85 años) que conocimos el año pasado y que conserva un núcleo de gallinas alicantinas de unos doce ejemplares entre machos y hembras, heredadas de su madre que las tenía de toda la vida, podemos imaginar la antigüedad de las mismas. Este núcleo de gallinas, según el testimonio de Pepe, jamás ha tenido contacto con otras variedades, siempre ha criado esta raza, ya que antaño fue una gallina muy preciada por la calidad de su carne y el tamaño de los huevos.


Además de la gallina alicantina plateada existe una variedad de gallina conservada por Julio, antes citado, un grupo de unos 25 ejemplares que él denomina “alicantina pintada o gallinas camperas” y que las mantiene desde hace más de 35 años como él dice “como oro en paño”. Estas gallinas se las cedió un gran amigo suyo, muy aficionado a la cría de gallinas autóctonas, al no poder atenderlas debido a su avanzada edad y con estas palabras le dijo: “Julio, hazte cargo tú de esto porque es lo único que queda de la raza”.


Estas gallinas pintadas convivían junto con otras gallinas autóctonas, entre ellas, las alicantinas plateadas, en una zona conocida como el campo de Elche; según su testimonio, era una zona de las más ricas en diversidad de gallinas y pavos autóctonos de la provincia de Alicante.

Carta manuscrita del Dr. Orozco contestando a Sergi Morán en sus primeros contactos.